El Yoga tonifica nuestro cuerpo, relaja la mente y también nos ayuda a mejorar nuestra vida sexual. Dentro de los ejercicios de Yoga, hay 5 posturas especialmente recomendadas para subir la libido y disfrutar todavía más del sexo.

El Yoga es una disciplina que combina cuerpo y mente para lograr relajación y dominio de nuestro físico. A parte de estar muy recomendado para liberar estrés, tonificar la musculatura y aumentar elasticidad, el Yoga también tiene efectos positivos en nuestra vida sexual. Para empezar a practicar Yoga y notar sus efectos en la cama, os proponemos 5 posturas, cuyas imágenes son cortesía de Ciudad Yoga.

Ejercicios de Yoga para mejorar el rendimiento sexual

1.  Postura de la vaca (Bitilasana)

Ponte a cuatro patas en el suelo, apoyada sobre manos y rodillas. Empieza con la espalda recta y respira profundamente mientras arqueas la espalda hacia abajo y subes la cabeza. Mantén la respiración unos segundos y, al sacar el aire, baja la barbilla y arquea la espalda hacia arriba.

Esta práctica estira espalda y abdomen. Mientras realizamos las respiraciones, podemos aprovechar para hacer ejercicios de Kegel, trabajando el suelo pélvico.

 

2.  Gran ángulo con flexión hacia delante (Upavistha Konasana)

Siéntate en el suelo con las piernas estiradas y ve abriéndolas hasta que puedas. Baja el torso, lo más cerca posible del suelo, y coge la punta de los pies con tus manos. Si no puedes estirar tanto las piernas, flexiona ligeramente las rodillas. Mantén la postura 30 segundos y relaja.

Esta postura mejora la circulación de los órganos sexuales y trabaja la musculatura abdominal, relaja las ingles y es muy eficaz para estirar las piernas y fortalecer muslos.

 

3.  Flexión del frente sentado (Paschimottanasana)

Sentada en el suelo, estira las piernas y mantén los talones juntos. Dobla el torso hacia delante, hasta reposar sobre las piernas y tener la cabeza entre los brazos, tratando de mantener la espalda recta. Estira los brazos a lado y lado de las piernas y colócalas en paralelo, al lado de los pies.

Con esta postura relajamos la pelvis y los muslos, disminuye el estrés y las molestias menstruales, estira la columna vertebral y estimula los órganos sexuales.

 

4.  Postura del arco (Dhanurasana)

Esta postura es un poco más complicada. Túmbate en el suelo, sobre tu estómago, levanta el torso y, a la vez, piernas y brazos para llegar a sujetar los pies con las manos. Coge aire y aguanta la respiración mientras mantienes la cabeza alta y, al soltar el aire, relaja el cuerpo. Repite el ejercicio cuatro veces y descansa.

Esta postura estira buena parte del cuerpo y fortalece la espalda. También mejora el funcionamiento de los órganos sexuales abdominales y revitaliza.

 

5.  Postura del ángulo amarrado (Baddha Konasana)

Siéntate en el suelo con la espalda recta y los pies tocándose, frente a ti. Baja las rodillas lo más que puedas, ya que lo ideal es que con la práctica lleguen a tocar el suelo. Reúne tus manos entrelazadas sobre los pies y mantén la espalda lo más recta posible, con la cabeza alzada, 30 segundos.

Esta postura revitaliza las piernas cansadas, mejora la circulación de los órganos sexuales, libera las cervicales, estira los muslos y propicia la fertilidad.