5 Factores que hacen tambalearse una pareja estable
Los problemas más habituales que llevan a una ruptura sentimental

Una pareja puede decidir terminar su relación por muchas razones, y a veces es mejor eso que mantener un vínculo que provoca sufrimiento en los dos implicados. Hablando en términos generales, una pareja puede romper como consecuencia de un hecho suficientemente impactante (como, por ejemplo, una infidelidad), pero hay otros factores que van desgastando la relación poco a poco y que, finalmente, terminan por acabar con el amor.
Un portal de citas para adultos ha preguntado a sus usuarios sobre sus relaciones personales y, de las respuestas que han recibido, han podido sacar una lista de los 5 problemas más comunes en una relación estable: secretos, problemas económicos, diferentes ideas sobre cómo formar una familia, rivalidad y falta de intimidad.
Los problemas más perjudiciales para una relación
1. Dificultades económicas
Cuando el resto de ámbitos de la vida marchan bien puede cultivarse el amor pero, cuando surgen dificultades inesquivables la pareja ha de hacerles frente. Según la encuesta, los problemas económicos merman la pareja, crispan el ambiente y propician muchas discusiones fruto de la tensión y la precariedad, que afectan directamente al humor y a la vida de quien las padece.
2. Secretos y desconfianza
Es bien sabido que una relación basada en mentiras no puede durar. Dejando de lado los grandes engaños, como las infidelidades, los usuarios destacan que los pequeños secretos e incluso las mentiras piadosas hacen crecer la desconfianza y, una vez rota esa fe en la pareja es imposible recuperarla.
3. Lucha de poderes
Es importante que una pareja funcione como un equipo y eviten competir entre ellos. Tratar de ganarse el cariño de los hijos, la atención del resto de familiares o incluso del perro puede llevar a una rivalidad insostenible, a peleas y a una tensión muy alejada del cariño y el apoyo que ha de ser una relación estable.
4. Mala vida sexual
En algunas ocasiones, la falta de contacto físico surge como síntoma final de que la pareja no está pasando por un buen momento. En otras ocasiones, no obstante, esta razón es la que propicia los problemas. En una relación de pareja es clave que haya momentos de intimidad y que, si surgen problemas sexuales, se aborden y se traten conjuntamente.
5. Desacuerdos sobre la familia
¡El eterno debate! Tener ideas diferentes sobre los hijos, el futuro o incluso el lugar en el que formar una familia puede ser el detonante de una ruptura. Si bien la comunicación es muy importante, es cierto que hay diferencias insolventables que llevan a una pareja a decidir que la mejor opción es terminar con esa relación, ya que no tiene futuro.