11 causas de una mala vida sexual

1. Pies fríos. Un estudio de la Universidad de Groninger afirma que el 80% de las mujeres llegamos más fácilmente al orgasmo si llevamos puestos unos calcetines. Así pues, dejemos de lado lo de que no queda sexy y disfrutemos con los pies calentitos. Según Gert Holstege, director del estudio, esto se relaciona con la sensación de calidez y confort, ya que nos ayuda a relajarnos y centrarnos sólo en el placer.
2. Píldoras contra la alopecia. La calvicie es uno de los mayores complejos masculinos, y no son pocos los que toman medicación para combatirla. Esosí, cuidado con las patillas contra la alopecia, porque una investigación de la Universidad de Washington revela que pueden causar disfunción eréctil, en algunos casos incluso de forma permanente.
3. Resfriado o congestión. Cuando estamos refriados y apenas podemos respirar en lo último que pensamos es en tener sexo. Buena parte de esta reacción viene por la congestión nasal. La Universidad de Gotemburgo ha presentado un estudio que sostiene que el olfato es clave para nuestro deseo sexual, ya que hay muchas señales químicas que recibimos por ese sentido.
4. Televisión en la cama. ¡La tele fuera de la habitación! Un estudio de la Universidad de Inonu ha demostrado que las parejas con el televisor en la habitación tienen la mitad de sexo que la media. Además, los investigadores añaden que los programas que más matan el apetito sexual son los reality shows y las películas violentas.
5. Encías sangrantes. Una investigación publicada en el Journal of Sexual Medicine revela que existe una conexión entre el sangrado de las encías y la disfunción eréctil. No olvidemos que ambos problemas tienen causas en común: envejecimiento, tabaco, enfermedades cardiovasculares y diabetes.
6. Dolor de articulaciones. Aunque la mejor edad para la vida sexual de una pareja se da entre los 60 y los 70 años, gracias a la intimidad, confianza y autoconocimiento, las articulaciones débiles afectan negativamente a las relaciones. La psicóloga Paula Aguirre Hall recomienda no forzar posturas y planificar el sexo en los momentos del día en los que estemos más ligeros y duela menos.
7. Píldora anticonceptiva. Muchas veces se ha hablado de que las pastillas anticonceptivas disminuyen nuestro deseo sexual, y es cierto. Entre algunos de los problemas que conllevan las pastillas se encuentra poca lubricación, bajón de la libido y dificultades para llegar al orgasmo, todo ello debido a la cantidad de hormonas que conllevan.
8. Sobrepeso. La doctora Modgil explica que “la obesidad cambia los niveles de testosterona del cuerpo, lo que afecta a la libido de hombres y mujeres”. La psicoterapeuta Sammy Margo también añade que el sobrepeso en las mujeres ejerce presión sobre el suelo pélvico y dificulta la llegada al orgasmo.
9. Antidepresivos. Para quien esté tomando antidepresivos, ya se encuentra en una situación delicada que no favorece el deseo sexual. Además, la química de los medicamentos afecta directamente en nuestro apetito sexual. Es importante recordar que las pocas ganas de sexo o el mal rendimiento en la cama vienen provocados por las pastillas, no es cosa nuestra.
10. Diabetes. El doctor Jackson explica que la diabetes afecta a nuestras arterias y flujo sanguíneo, y el alto nivel de azúcar en la sangre merma la sensibilidad de los nervios en los órganos sexuales. Para más datos, uno de cada tres hombres con diabetes sufre disfunción eréctil.
11. Habitación desordenada. El último mata-pasiones de la lista tiene fácil solución: ordenar el entorno. Debra Herbenick, autora de ‘Because It Feels Good: A Woman’s Guide to Sexual Pleasure and Satisfaction’, sostiene que las mujeres tendemos a distraernos más fácilmente durante el sexo, y un lugar con muchos estímulos visuales, desordenado e incómodo, no nos deja disfrutar del placer sexual.